sábado, 2 de febrero de 2013

One Shot #1: Te quiero con fuerza, te odio a momentos

 Sabes que todo está cambiado cuando nada sale como tu esperabas, cuando tus amigos no reaccionan a todo como tú esperabas, cuando tu familia no tiene en cuenta lo que tú piensas. Sabes que todo está cambiando cuando nada es como antes.
-En serio mamá?- dije llorando.
-Sí, lo siento cariño, pero aquí sola no te puedes quedar- dijo mientras me abrazaba fuertemente.
-Pero mamá, que aquí tengo a todos mis amigos, y sabes que soy lo suficientemente tímida como para que me cueste hacer amigos en el otro colegio- dije ahogada en llanto.
-Lo siento- dijo mi madre.
Hoy comienzo en el instituto nuevo. Dejé a mis amigos y a mi novio en Londres, y ahora estoy aquí en Bradford, en un sitio donde no quiero estar. Mi madre me ha traído  y todos se me han quedado mirando. ¿Será porque soy la nueva? Bueno, eso es lo más probable.
-Chicos, esta es Rachel (Reichel) , vuestra nueva compañera- dijo el profesor de historia dándome un empujón hacia delante.
-Ho...Hola- dije completamente sonrojada y con la vista fija en el suelo.
-Hola- dijeron todos a la vez, cosa que hiso que levantara la vista y mirara al fondo de la clase. Cosa que no debería haber hecho.
-Bueno Rachel, te sentarás al fondo, porque es el único sitio que hay libre.
Pero yo no respondí, estaba lo suficientemente ocupada mirando a aquel morenazo de  aires misteriosos como para responderle al profesor. Lo que más me llamó la atención es la forma en la que me miraba. Con aire de vampiro ¿quizás? No deja de ser ilusa Rachel, te está mirando por que eres la nueva.
-¿Rachel?- repitió en profesor.
-¿Sí?.
-Que te sentarás al fondo- dijo señalando el sitio que no quería que señalara.
-Val…Vale- me dirigí a mi sitio y me senté sin mirar a la persona que tenía a mi lado.
La clase fue lo más incómodo que eh presenciado nunca. Y mi timidez no ayuda. Cuando se acabó algunas chicas se acercaron a mí y me acribillaron a preguntas.
-¿Cómo te llamas?- me preguntó la más alta.
-Rachel  Jane Mccann- dije en un susurro.
-¿Y de dónde vienes?- me preguntó una morena.
-De Londres- dije en otro susurro.
-¿Y donde vivías en Londres?
-En un Loft en el mismo Coven Garden - dije recordando aquel sitio tan maravilloso.
Y así se pasaron todo el cambio de clase. No me dejaban en paz, era unas cotillas y yo lo único que quería era salir corriendo de aquel sitio.
-¡Dejadla en paz! – dijo con mucha mala leche aquel moreno.  Todas salieron corriendo.
-Gracias- dije lo más bajo que pude.
-De nada Rachel Jane Mccann.
-Ah ¿te sabes mi nombre? Que raro, pensé que no te caía bien.
-¿Por que no me ibas a caer bien?- preguntó confuso.
-Porque eras el único que no me había hablado- dije suspirando.
-Ya, es que soy muy cerrado Rachel Jane Mccann.
-¿Puedes parar de llamarme así?- dije sonriendo.
-¿Pues entonces como quieres que te llame?- preguntó mientras apuntaba lo que decía la profesora de lengua.
-Puedes llamarme Jane- dije apuntando yo también.
-No te gusta que te llamen Rachel?- me miró.
-No mucho- dije sin levantar la vista de los apuntes.
-Pues entonces te llamaré Rachel- le miré mal- Ya que no te gusta, y yo soy único, pues entonces te llamaré así- sonreí, porque era estúpido, muy estúpido.
-Vale- puse los ojos en blanco.
El resto del día pasó sin que pasara nada nuevo. ¿Por qué? Porque nadie más se me acercó y eso me gustó por una parte, pero por otra me sentó muy mal. Me sentía sola, y a mí no me gusta sentirme sola.
-¿En que o quien piensas?- me dijo aquella voz con aires misteriosos mientras caminaba a casa.
-¿Tú?- dudé- Pues en los deberes que han puesto hoy- mentí.
-Ninguna persona normal piensa en deberes cuando va del cole a casa- me miró de reojo.
-¿Yo eh dicho que sea normal?- sonreí.
-No, pero yo tampoco lo eh dicho- dijo mirando un coche que pasaba.
-Es que a ti se te nota, yo paso más desapercibida.
-Oh Rachel que graciosilla ¿no?- dijo en tono de broma.
-Pues no- paré en seco.
-¿Porqué paras?- me miró confundido.
-Pues porque vivo aquí- le miré y sonreí.
-Pues que sepas que yo vivo al lado- me giñó un ojo y sonrió.
Entré en casa y dejé las cosas en la entrada y fui directo a la cocina. ¡Me moría de hambre! Después de merendar cogí mis cosas y subí, tenía que hacer deberes y estudiar, abrí las cortinas de la gran ventana que tengo en mi habitación y puse la música a un volumen aceptable. Hice lo de siempre, cantar, bailar, saltar en mi cama y cuando venían las canciones tristes llorar.
Estaba tan metida en mi mundo que no sentí como me llamaban, hasta que algo dio en mi ventana.
-¿Qué coño?- me di la vuelta, y allí estaba el sonriendo, o mejor dicho riéndose a carcajadas de mi baile- ¿Qué haces ahí?- le miré mal.
-Vivo aquí- sonrió- Y esta es mi habitación.
-¡Dios! Que vergüenza- me sonrojé.
-No te preocupes, solo estoy mirando desde que comenzó How  To Save A Life- The Fray.
-¿Tú eres tonto?- me miró mal- Ese es el principio- Soltó una carcajada.
-Lo sé- soltó una carcajada- Pero que sepas que bailas muy bien- dijo con un tono burlón.
-Gilipollas- dije por lo bajo y cerré la ventana y pasé la cortina.
Me pasé la noche haciendo deberes y después me conecté en twitter y el facebook. ¡Sorpresa! Zayn me seguía y  me había agregado de amigo… No solo le tenía en mis narices… También tenía que aguantarlo en clase y en las redes sociales… ¡Era increíble!
Lo acepté y seguí en lo mío. Me entretuve y alguien me abrió en facebook.
Zayn: Hola.
Yo: Hola.
Zayn: ¿Qué tal el primer día de colegio?
Yo: Bien, si no fuera porque un gilipollas me ha acompañado hasta casa y dio la casualidad que era mi vecino. Que después se puso a espiarme por la ventana de mi habitación.
Zayn; Menudo pervertido ¿No?
Yo: Y que lo digas.
Nos quedamos hablando mucho tiempo. Tanto que me fui a la cama a las 2 de la madrugada. La conversación había sido interesante. El era increíble y yo, yo solo estaba dejando de ser tímida por primera vez con alguien. Me dijo que si algún día necesitaba ayuda, que solo abriera la ventana y le llamara, que el estará ahí para ayudarme.
Al martes a las 7 ya estaba despierta, sería raro entrar al nuevo cole. Jode mucho que te etiqueten como “la nueva” ¿Acaso no sabían mi nombre? Y si no lo sabían ¿Porqué no lo preguntaban?
Ya estaba en la puerta, iba vestida (así) supongo que era perfecto para un día de abril, aunque era Inglaterra, podía cambiar todo en un pispas.
Entré en el cole y me fui a la clase de gimnasia, era la primera clase. Me cambié mientras todas me observaban, vale, ya sé que no estaba muy bien, pero bueno, no hace falta que me miréis.
-¿Qué pasa? ¿Porqué me miráis?- les pregunté aturdida.
-¿De qué conoces a Zayn Malik?- me preguntó la rubia.
-Es mi vecino- dije seria-¿Tan raro es que él se acerque a mi?- le pregunté.
-Pues solo te digo esto, Rachel. Cómo te acerques a él, te mato. El es mío- dijo la rubia mientras se me acercaba con un gesto de amenaza-¿Queda claro?
-¿Y si no lo hago? ¿Y si me acerco a él?- le desafié.
-Pues no podrás poner un pie en este instituto otra vez, y créeme, no serías la primera en pasar por eso.
Me quedé helada. Bien, muy bien. Segundo día de clase y tengo problemas ¿Porqué me pasaban estas cosas a mi? Ya, claro Rachel, tenías que conocer a Zayn, el te ha traído tantos problemas. Me terminé de vestir, y me hice una coleta, me miré en el espejo del baño y salí hacía el gimnasio.
La clase comenzó. Y yo estaba sola, todas las chicas estaban con Ámber, la rubia. Nos mandaron a ponernos en parejas, y qué casualidad que todas las chicas tuvieran parejas y a la que le tocaba conmigo, fingió que le dolía el estómago.
-Te toca conmigo Rachel- dijo la voz del chico que es mi “vecino”
-No, yo no lo haré- dije en un susurro.
-¿Qué te han hecho?- se puso frente a mi mirándome a los ojos.
-¿Quiénes?- disimulé. Lo hago muy bien.
-Las chicas.
-Nada, en el vestuario me han dicho de quedar, pero soy demasiado tímida.
-¿Segura?- me preguntó, como si supiera que mentía. Como si fuera obvio.
-Segura- respondí en un susurro- Ahora… ¿Me puedes dejar en paz?- dije como si estuviera frustrada, y lo estaba, no quería que el estuviera conmigo. Me harían la vida imposible.
-Claro- se fue.
Las siguientes semanas evité todo tipo de contacto con Zayn, ya no abría la ventana y me quedaba a oscuras en mi habitación escuchando música aún más baja. Estaba pasándolo mal porque mi madre nunca está en casa y mi padre tampoco. Y mis amigas no están. No las tengo aquí. Estoy sola y no sé que hacer para que Ámber y sus cómplices no me molesten.
Si os soy sincera, me gusta Zayn. No es simplemente un chico más. No, nunca lo ha sido. Me encanta que me llame Rachel, aunque creo que es la única persona en el colegio que sabe que no me gusta que me llamen así. También es perfecto. Sabe cuando no quiero hablarle y ha intentado hablar conmigo una vez en casa, tirándome piedrecillas en la ventana. Pero nunca respondo. No respondo porque además de ser lo suficientemente tímida para hablarle después de tanto tiempo, no quiero terminar mal.
Hacía días que Zayn no llamaba a mi ventana. Ahora se dedicaba a dejarme mensajes en el Facebook. Mensajes privados. Cómo:
“Si el hecho de que no me quieras hablar tiene que ver algo con Amber, dímelo, yo lo arreglo"
”¿Porqué no me hablas? ¿Ahora te piensas que eres la más guapa del mundo y yo no estoy a tu altura? Respóndeme por favor”
“Voy a tirar una piedra grande y te romperé la ventana si no me respondes a este mensaje”
“Ya es el cuarto y no eh roto la ventana, tengo paciencia, es casi imposible que la pierda, pero si no me respondes me colaré en tu casa”
Los ignoré. Ignoré cada uno de los mensajes que me envió. Que si, para mí era duro, pero yo estoy por delante de él en mis prioridades de supervivencia. No sabía que hacer ¿Y si me rompía la ventana?
Me quedé pensando, estaba ensimismada. Mis padres no estaban y eran las 10 de la noche. “Estaban en la oficina” Sentí ruidos abajo. Pero me acababa de llegar un mensaje de papá.
“Esta noche no iremos a dormir a casa, tu madre me ha dicho que hay dinero en la encimera. Cualquier cosa, nos llamas”
¿Entonces quien era? Me asusté. Me asusté mucho. Decidí llamar a Zayn, solo porque tenía miedo. Abrí la ventana, que llevaba tanto tiempo cerrada. Pero no, el no estaba ahí como me prometió aquel día en la conversación. Las luces de su habitación estaban apagadas y yo no podía gritar ¿Porqué no estaba cuando más lo necesitaba?
Presa del pánico, me tumbé entre la cama y la pared, para esperar mi fin ¿Y si llamaba a mis padres? No, que se preocuparían por nada ¡Qué por nada! Me gritó mi consciencia ¡Alguien se ha colado en tu casa! Me reprochó mi cabeza.
Alguien entró en mi habitación. Me asusté más. Solo veía sus zapatos. Unas converses. Eran blancas. Entonces me permití el lujo de respirar. Pero respiré demasiado fuerte y el me escuchó.
-Estás aquí- dijo sonriendo mientras me miraba con ojos de asesino.
-¡Dios!- dije mientras se me pasaba el susto- Eres tú- respiré más hondo.
-Te lo dije en un mensaje. No sé porqué te asustas- dijo serio.
-Porque no leo tus mensajes Zayn, por favor… Déjame en paz- dije seria.
-No, si me ignoras quiero saber que hice para que lo hagas.
-Pues…- ¿Qué le decía? ¡No tenía ningún motivo que no implicara a las chicas!
-¿…Pues?
-Pues nada Zayn. No quiero tener ningún tipo de relación contigo. Tengo novio- ¿Qué digo?!
-Ah…- dijo triste.
-¿Te puedes ir?
-¿Sabes que siempre estaré aquí, no?
-Lo sé.
-Y que como ese capullo te haga algo, lo mato.
-No me hará nada Zayn, olvídame ¿Vale?

Otro día en el colegio, al fin viernes. Hoy  hay una fiesta en casa de Amber. Me ha invitado, bueno, prácticamente me ha obligado a ir. Me estaba vistiendo, cuando me acordé del día en que hablé con Zayn, como me vio bailar y como le echo de menos.
Me termine de vestir (así) Y abrí la ventana, necesitaba aire fresco. No podía seguir así. Pero fue un error, ahí estaba él. Con su ventana abierta, y fumando ¿Fumaba? No sabía eso. Pero nunca olía a tabaco, así que era raro.
-¿Vas a la fiesta?- me preguntó al verme vestida.
-Si- dije seria- ¿No te dije que no me hablaras?- me disponía a cerrar la ventana.
-Tú novio está en Londres, no sabrá nada de que has hablado con tu vecino- dijo con un tono irónico.
-¿Tú eres gilipollas?- me paré en seco- No quiero hablar contigo Zayn, no quiero- dije seria.
-Te esperaré, si Rachel Jane Mccadne. Te esperaré.
Dejé la ventana abierta, el aire frío que entraba era puro. Me hacía pensar, porque me enfriaba el cuerpo, cuando más caliente lo tenía. Si, estaba tan saturada por esto de Zayn que tengo hasta un tic.
Entré en la casa de Ámber, casa de pija. Era grande, más o menos como la mía, pero los muebles eran de catálogo y estaba muy iluminada. A lo mejor la veía así porque la mía siempre estaba a oscuras, como no había nadie, pues es lo que hay. Estaban casi todos los del cole, Ámber y sus secuaces, los tíos buenos de bachillerato, las de las demás clases, y Zayn. Estaba al fondo, hablando con Benjamín, uno de mi clase. Estaba muy guapo, con una camiseta blanca de mangas, pero las tenías remangadas, con unos pantalones beige y converses blanca. Tenía un pendiente negro guapísimo y el tupé hecho a la perfección. Sonreí al verle, y él me miró nada más entrar.
Ámber se acercó a mí, con aires de grandeza como siempre, pero la ignoré. Y me gritó.
-¿Qué has hecho para que Zayn viniera?- me preguntó feliz.
-Nada, apenas abro la ventana para no hablar con él- se que se puso feliz al escuchar eso.
-Pues haces bien, eres de las pocas que ha durado tanto- me abrazo, sonreí falsamente porque Zayn miraba, si no hubiera dejado mi cara de póker que es la mejor que hay en el mundo.
-¿Qué quieres?- pregunté resignada.
-Pues que le digas a Zayn que baile conmigo- dijo mientras reía, y mientras yo la quería matar.
-No puedo hablar con Zayn, nos llevamos mal- mentira, pura mentira.
-Mira niñata, tú y yo sabemos que no es verdad, que te llevas demasiado bien con Zayn, que él está por ti y que hará lo que le pidas.
-Mira Ámber, te tengo que decir 5 cosas:
1- No soy una niñata.
2- Si, es verdad, no le hablo.
3- No me llevo bien con él, por lo menos yo no.
4- Él no está por mí, y si eso es lo que crees estás equivocada. Y 5- No hará lo que yo le pida.
-Pues entonces irás y lo convencerás de que baile conmigo.
-¿Qué pasaría si no lo hago, o no lo consigo?- estaba nerviosa.
-Lo mismo que si seguías hablando con él- dijo mientras me sonreía- Venga, antes de que acabe la fiesta Zayn tiene que bailar conmigo, tienes toda una noche para lograrlo. Buena suerte- Y se fue.
Bien, tenía una misión. Acercarme a Zayn, convencerlo para que baile con Ámber y sin que me saque nada. Estaba nerviosa, temblando. Me iba a acercar a Zayn después de mes y medio sin hablarle a penas.
-Hola- dije poniéndome delante de él, Benjamín se levantó y se fue sin decir nada para darnos intimidad.
-¿Ahora me hablas? ¿Qué pasa? ¿Me seguirás negando de que el hecho de tu ignorancia no tiene nada que ver con Ámber y sus secuaces?-  estaba tenso, tanto como yo, pero aparte de tenso se le notaba enfadado, muy enfadado.
-No, ya te eh dicho que no ¿Qué te hace pensar eso?- dije mientras miraba mis dedos, no sé mentir.
-No eres la única que ah pasado por esto- dijo con la voz ronca, y también con voz misteriosa. Era como la noche, no sabes lo que hay ahí porque está todo oscuro, y yo hoy tenía mi vena curiosa.
-Ah, que hay más…- mi voz fue de decepción, no quería que lo notara, pero es que me sentía así de verdad.
-No, a ver…- trató de explicarse pero me di la vuelta y empecé a caminar hacia la puerta, quería tomar el aire- ¡Jane!- me había llamado Jane, cosa rara.
Abrí la puerta y me fui al porche, el aire era frío y refrescante. Tenía que pensar, tenía que pensar en que hacer con Zayn y conmigo misma también.
-No me has dejado terminar- sentí la voz cálida otra vez, no, no quería hablar Zayn, me harás llorar.
-No quiero hablar contigo, sigamos como estábamos hace 10 minutos.
-¿No, me vas a escuchar? estoy harto de esto.
-Y yo- dije en un sollozo.
-¿Estás llorando?
-No- me levanté aún de espaldas a él, me sequé las lágrimas y me giré- Dile a Ámber que me llamaron mis padres por una urgencia.
-¿Te vas?-  le brillaban los ojos a la luz de la farola que era lo único que nos alumbraba.
-Sí, no me apetece hablar contigo, tengo demasiados problemas como que para que tú te conviertas en uno más.
-Entonces no me vas a escuchar…- era un tono al que había que temerle.
-No Zayn, me voy, no te voy a escuchar.
Me di la vuelta, y cuando me disponía a dar el primer paso, alguien me cogió del brazoZayn me cogió del brazo y tiró de mi hasta él.
Lo tenía en frente, cerca de mí, tan cerca que podía sentir su respiración y juraría que también podía sentir su corazón latir.
-Ahora me vas a escuchar- dijo un susurro, era emocionante y a la vez tenía miedo de cómo podía ser todo esto.
Me quedé callada, esperando a que dijera todo lo que pensaba o lo que sentía, o simplemente lo que tenía ensayado decirme.
-No hay otras, ni las ha habido. Aunque creo que eres la persona menos indicada para enfadarte por eso, ya que has estado mes y medio pasando de mi, y aunque no lo parezca eso me duele- Yo estaba perdida en su voz, en lo profunda que era. Mierda, tenía miedo, y no precisamente de él, o de Ámber- Nunca había sentido lo que siento, nunca. Tampoco había esperado por una chica, estoy acostumbrado a que ellas vallan detrás de mí y no quiero parecer engreído.  Tampoco es cuestión de eso, porque nunca había hecho muchas cosas y llegó el día en que las hice, pero nunca había estado tan desesperadamente loco por alguien, y tampoco había necesitado una chica para poder respirar, o dormir tranquilo. Y tú no me lo pones fácil Rachel.
-Zayn, por favor esta noche baila con Ámber, hazlo por mí, si de verdad te importo.
Me había vuelto a decir Rachel, ahora me gustaba mi nombre, y solo por el  simple hecho de que él lo decía.
Me solté de su mano, me di la vuelta y comencé a caminar. Sentía como las lágrimas caía por mi rostro y el aire frío me golpeaba la cara. Pero también escuchaba como Zayn me llamaba, y como esa voz cada vez se hacía más lejana.

-¡Ya voy!- grité por quinta vez ¿Y mis padres? Pff, siempre igual, tenemos que trabajar, tenemos que trabajar y tenemos que trabajar. Bajé las escaleras con prisa, a lo mejor era algo importante, o a lo mejor era Zayn, aunque parece que últimamente prefiere colarse sin decirme nada.
Abrí la puerta, y un chico moreno entró como un relámpago, si, estaba enfadado.
-Buenos días, eh- dije haciéndome la indignada.
-De bueno no tiene nada- me miró a los ojos, estaba triste, como si le hubiera engañado. “Lo has hecho” dijo mi yo interior.
-¿Qué ha pasado?- me estaba preocupando.
-Que no me gusta que me mientan Rachel, es lo peor que puedes hacer cuando te lo doy todo, mentirme. Y tú lo has hecho.
-¿Qué dices?- le miré espantada.
-Que tienes la oportunidad de decirme la verdad, de decirme que todo este tiempo lo hemos estado pasando mal por culpa de Ámber, o la oportunidad de perderme y de que después de un tiempo mal, comience a pasar de ti como paso de ella.
¿¡QUÉ!? ¡Que me dejaría! Bueno, en teoría no teníamos nada, pero es lo que hay, tengo que decirle la verdad. Tengo que decírsela.
-Zayn- dije en un susurro. Asintió como dándome permiso para continuar- No…- “¡Mierda no lo digas!” me decía mi voz interior- No, esto no tiene nada que ver con Ámber- dije seria.
Su cara fue de dolor, de decepción, era un poema, pero no podía hacer más ¿O, sí?
-Solo quiero que sepas que ayer sí que bailé con ella, solo por ti- y salió de casa pegando un portazo.
¡Mierda, mierda, mierda, mierda! Lo había arruinado todo, no… esto no era cierto, era una broma, no mierda.
Tres semanas, tres semanas con miradas, lágrimas y decepciones. Zayn no me hablaba, nada. Estaba harta, no podía más ¿Porqué estaba así? Si  hubiera sido otra persona me daría igual, pero no, no me da igual.
-Hola- dije mostrando la sonrisa más falsa de mi vida.
-Hola- me respondió la que supongo que es hermana de Zayn, no sé, no la conocía.
-¿Está Zayn?- pregunté tímida.
-Sí, está en su habitación… Pero no creo que quiera hablar contigo- dijo mientras me hacía un chequeo.
-Lo sé, pero es que la eh cagado y no puedo estar así, el no se lo merece.
-Estamos de acuerdo en algo. Un consejo, a mi hermano nunca le mientas, porque eso le duele más que cualquier cosa en el mundo, no soporta la mentira y menos cuando sabe la verdad.
-Lo tendré en cuenta- dije pasando.
-Suerte- dijo mientras yo subía las escaleras.
Caminé todo el pasillo hasta llegar a su habitación, no es difícil perderse porque yo vivo en una casa exactamente igual a la de él.  Y está en la habitación  frente a la mía.  Bien, ahí estaba la puerta, lo vería en otro sitio que no fuera el colegio. Había cogido otra ruta para volver a casa y en el patio desaparecía. Me sentía mal por eso. Me sentía mentirosa, asquerosamente mala persona.
Entré sin llamar, porque si lo hacía no me abriría y mi misión no sería cumplida.
-Hola- le dije en un susurro, estaba mirando la ventana ¿Esperando a que yo la abriera para ver si estaba? No lo sé, pero era alucinante.
-¿Qué haces aquí?- dijo seco. Si, estaba muy enfadado.
-Pues… eh venido a pedirte perdón, y a contarte la verdad- dije en un susurro, sentía algo, sí, eso era miedo, miedo a perderlo, o a que no me quisiera.
-¿Ahora? ¿Después de tanto tiempo?- se levantó de la cama, estaba vestido solo con un pantalón de chándal gris. Tenía el pecho descubierto y pude ver algunos de sus tatuajes, no sabía que tenía tatuajes.
-Mejor tarde que nunca ¿No?- ¡en serio esa era mi escusa! Pues sí, la verdad es que si.
-Mira, hagamos algo, me dices lo que llevas días pensando en decirme, después te vas y me dejas de hablar, por favor.
-Zayn…- mi corazón estaba roto en ese momento.
-¡Ni Zayn ni hostias Jane!- gritó. Mierda.
-Vale- dije en un susurro- Mira, ya sé que no te gusta que te mientan, que es lo que más odias, y que me diste la oportunidad de decirte la verdad y que te mentí cuando tú sabías de que iba todo. Pero lo siento, lo siento mucho. Yo solo quería protegerme, te mentí con lo de mi novio, con lo de que no quería que me hablaras… Te mentí vale… Y ya lo sé, que estuvo mal, pero yo no soporto la presión Zayn, y si me amenazan lo que haré es protegerme, pero si luchar- ¿En serio estaba llorando? ¡Me prometí no llorar!
-Vete- fue lo único que salió de sus labios.
-Joder Zayn, lo siento. ¿Qué tengo que hacer?
-Tuviste tu oportunidad Jane, y me mentiste ¿Entiendes? Te dije que si me decías la verdad todo seguiría igual, que lo olvidaría, pero que si me mentías otra vez, te olvidaría y pasaría de ti.
-Joder, lo siento ¿En que idioma te lo tengo que decir?
-En ninguno, ya no me digas nada más.
-Zayn, te juro que como no me hagas caso, soy capaz de hacer cualquier locura.
-No estás tan loca Jane, no estás tan loca.
-Entonces ahora sí que me has perdido, dije que haría cualquier cosa por recuperarte y  lo haré. Pero después no te arrepientas de esto- y salí pegando un portazo, estaba mal muy mal y no tenía al chico del cual estaba enamorada. Si de eso tenía miedo en la fiesta, de enamorarme de él. Del absurdo sentimiento que había en mi, que no me dejaba ni respirar tranquila. Tenía miedo de haberme enamorado.

Habían pasado por lo menos tres horas de mi conversación con Zayn. En verdad no haría nada, pero tenía que llamar su atención de alguna forma y parece que estaba fallando, porque Zayn pasó de mi, de todo lo que le dije y de lo que hice.
Abrí los ojos lentamente, estaba todo oscuro y yo estaba cansada, tenía los ojos hinchados seguramente, pero es que no podía parar de llorar. Algo se revolvió a mi lado y me giré asustada, pero no. No era nada malo. Y ahí lo vi, con la cara seria pero  se le notaba feliz, me estaba abrazando por la cintura y no tenía camisa puesta.
-¿Qué haces aquí?- pregunté con dificultad.
-Cuando te fuiste, me sentí mal porque solo eh pensado en mi todo este tiempo. No sé, tenía que haberte hecho caso, además tenía miedo de que hicieras alguna locura.
-A ver, estás sin camisa abrazándome, no sé si estar feliz por esto, o sentirme rara.
-A ver, me colé porque como tus padres nunca están, pues no pasa nada. Cuando llegué aquí estabas llorando.
-No recuerdo haberte visto.
-No, porque estabas dormida- puse cara de asombro- Sí, dormías y llorabas, era raro.
-¿Y?
-Y estabas temblando, entonces me quité la camisa y te abracé, y te eh estado observando una hora y media- dijo sonriente. Su cara era hermosa a la luz de la lámpara que supongo que había encendido.
-Vamos que te crees Jacob- dije de broma. Pero me fulminó con la mirada- En serio, a ver, te eh mentido Zayn ¿Podrás vivir con eso?
-Me da igual, siempre y cuando me prometas que no me mentiras más – me susurró.
-Te lo prometo.
-¿Entonces me dejarás enfrentarme a Ámber?- me miró con ojitos de cordero.
-No, la que se debe enfrentar a Ámber soy yo- dije seria.
-¿Sabes qué?
-¿Qué?
-Te quiero con fuerza y te odio a momentos.
-Zayn, yo solo te preguntaré algo.
-¿Qué?
-¿Estás dispuesto a que esto sea algo más?
-¿Con rosas y corazones?
-Con rosas y corazones.
-Por mi perfecto. 

sábado, 5 de enero de 2013

Capítulo 10 - Forever Young-


                                                                      -Narra Beth-
Abrí los ojos ¿Porqué se reían?  Miré a Louis que también lo abrió al mismo tiempo que yo. Tenía mi misma peli ¡Dios!
-¿Qué haces con la misma peli que yo, eh?- me preguntó haciéndose el indignado- ¡Eres  una copiona! ¿No que tu peli favorita era el Jorobado de Noterdame?- me miró mal.
-Una de ellas Tomlinson. Y yo compré antes que tú, así que mira- le saqué la lengua.
Menos mal que él tenía la primera parte y yo la segunda. Pero cuál de las dos es más bonita. Igual, Petter Pan seguiría siendo mi peli favorita. Nada mejor que un niño vestido de verde, que será por siempre joven.
Nos pusimos a ver la peli, primero la de Louis. Me encantaba… Wendy, me encantaba ese nombre. Pero Niall nos interrumpió.
-¿Porqué Petter Pan es vuestra peli favorita?- nos miró mientras comía palomitas.
-Porque quiero ser por siempre joven- dijimos Lou y yo a la vez, sonreí.
Después de ver la peli, nos quedamos un rato. Los chicos tenían que ensayar. Dios ¡Habían acabado de venir de viaje! No sé, me parece que los explotan o algo.
-Bueno, yo me voy que eh quedado con Alex- dije mientras recogía mi bolso, Jane me miró con cara de sácame de aquí, pero lo tenía que arreglar con los chicos. Aun se notaba la tención.
-Bueno, creo que ya es hora de que nos presentes a Alex ¿No crees?- dijo Harry, solo para molestarme.
-No jajaaj ¿A vosotros? ¡Ni de coña! Me dejaría- dije mientras me ponía la chaqueta.
-¿Qué te avergüenzas de nosotros?- preguntó Liam.
-No sabes cuánto Daddy Direction- dije ya en la puerta.
-Tráelo a cenar- dijo Niall, negué con la cabeza- Y te doy de mis galletas ¿Si?- me puso ojitos.
-Vale. Pero quiero galletas- me giré- A las ocho estoy aquí- grité saliendo.
                                                                -Narra Jane-
-¿Qué hacemos de cenar?- le preguntó Harry a los chicos.
-A Alex le gustan las pizzas… Da lo que sea por una, lo que sea- dije segura de mi misma.
-¿Tú como sabes eso?- me preguntó Harry, celoso.
-Vivo con Beth, es mi mejor amiga, y como una hermana… Y está colada por el- dije mientras ponía la Wii, me apetecía jugar.
-¿Y eso que tiene que ver?- me preguntó.
-Eres retrasado- me limité a decirle. La tarde pasó rápida. Y a las 7 y media,  ya estábamos poniendo la mesa… Porque teníamos mucha hambre. Pobre chaval.  
Como diez minutos después llegó Ed, que dijo que no se perdería la cena ni de coña ¿No sería un poco duro para él ver como la chica a  la que le hizo posiblemente la canción más dulce del universo, nos presente a el tío por el que está colada?
                                                     -Narra Beth-
Después de una tarde de peli con Alex, me acompañó a casa para que me cambiara de ropa  y tal. Nos pusimos camino a casa de los chicos, no sé, pero tenía miedo de presentárselo a los chicos. Pero era importante para mí que lo conocieran… La verdad, es que Alex  me importaba mucho.
-¿Estás nerviosa?- me miró con aquellos ojazos.
-Pues la verdad es que si- dije poniéndome roja.
-¿No debería estarlo yo?- me sonrió.
-La verdad es que si, o  no… No sé, ellos no ponen nervioso a nadie, solo a sus fans- dije sonriente- Pero no te preocupes, te caerán bien.
-No lo dudo, por lo que hablan en la tele de ellos, parecen muy majos.
-Lo son- le miré a los ojos deteniéndome en la puerta de casa de los chicos- Si te sientes mal, solo apriétame la mano ¿Vale?- le sonreí tímidamente.
-No creo que me sienta mal mientras tú estés- me derretí.
-Dame un beso- le pedí casi sin aire.
-¿No te han enseñado que los besos no se piden?- me sonrió.
-¿A,  no?- me sonrojé ¿Porqué siempre me sonrojaba?
-Pues no, los besos se roban, los más dulces son los inesperados- y me besó… dios…
-¿Entramos?- le pregunté mientras nos deteníamos unos minutos delante de la puerta.
-¿Preparada?- me sonrió.
-Siempre lo estoy- le cogí de la mano y toqué el timbre.
 Me abrió Eleanor. Entré,  nerviosa, no sabía que iba a pasar esa noche. El hecho de que los chicos conozcan a Alex para mí es súper importante.
-¡Pero mira quien está aquí!- gritó Louis, él tan expresivo como siempre.
Después de las formalidades iniciales, nos sentamos a comer. Me habían dicho que había pizza, y lo cumplieron por primera vez en semanas. Hicimos 10 minutos de sobremesa y nos fuimos a ver como los chicos cantaban un rato.
-¿Entonces Alex, a qué te dedicas?- preguntó Liam.
-Voy al mismo colegio de Beth- dijo Alex algo cohibido.
-¿Y a que te dedicas Beth?- preguntó Liam.
-¿En serio no lo sabéis? ¡Eso lo sabe hasta la reina!- dijo Jane haciéndose la indignada ¿No me tocaba a mi hacer ese papel?- Sonreí sarcásticamente.
-Voy a la Juilliard School, pero a la de aquí.
-¿En serio?- preguntó Harry sorprendido.
-Sí ¿Por qué?- le miré raro.
-¡Dios mío! Para entrar en esa escuela hay que tener un pedazo de nivel que lo flipas.
-O mucho dinero- espetó Eleanor.
-Pues mira que no- dijo Alex- Lo bueno de esa escuela es que si no tienes talento, el dinero es una mierda, no te vale de nada. Es la escuela que tiene el porcentaje más bajo en admisión en todo Europa- me sonrió- Además, es una de las mejores en todas las clases a las que va.
-Tampoco tanto- me sonrojé.
-Lo eres y lo sabes- dijo Jane.
-¿A que clases vas?- me preguntó Perrie.
 -Música y Ballet, danza y danza contemporánea.
-Todo un crack- dijo Louis.
-¿Pero no tenías que tocar por lo menos dos instrumento para estar en esa escuela?- me preguntó Eleanor.
-Y los toca, pero tienes que tocar dos instrumentos y cantar, y si no cantas, tienes que tocar más de tres instrumentos- dijo Alex.
-¿Tú cantas?- le preguntó Niall.
-No, soy muy malo cantando- dijo Alex.
-Entonces ¿Qué instrumentos tocas?- le preguntó Eleanor.
-La guitarra, el bajo, el piano, la batería y el violín.
-Wao- soltó Jane.
-¿Y tú Beth?- preguntó Niall.
-Pues… No os lo diré, ya os vale, no saber ni lo que hago- traté de hacerme la indignada-La guitarra, el bajo y otro más- dije sonriendo.
-¿No cantas?- preguntó Perrie.
-“NO” (dije yo) “Si” (Dijeron Alex,Jane y Ed a la vez mía)
-¿Qué?- preguntó Louis.
-Que no- dije seca.
-¡Si que cantas hombre!- soltó Jane
-Y tanto- dijo Ed.
-¿Sabéis quien me enseñó a tocar la guitarra?- maniobra de distracción en marcha.
-¿Quién?- preguntó Niall ¡Funciona!
-Ed – dije en un susurro.
-Pues te enseñó muy bien- dijo Alex. Sonrojada total la mía.
Niall se levantó y me dio una guitarra. Dios, no tocaba desde hacía una  semana por lo menos. Es que la verdad no me apetecía.
-Toca algo- me dio la guitarra.
-¿Qué os toco?- les miré sonrojada.
-La que cantamos en clase, haz el solo de guitarra- me dijo Alex.
-Me haría falta un bajo eléctrico, una batería  y dos guitarras más- dije sonriendo.
-Pero si lo hicimos solo dos guitarras y creo que quedó hasta mejor- me respondió.
-¿Qué tocasteis?-preguntó Liam
-Don’t Forguet de Demi Lovato- dije pasando la yema de los dedos por las cuerdas.
-Pues si lo hicisteis con dos guitarras me tengo que rendir a vuestros pies- dijo Ed.
Después de una hora hablando de música me convencieron para que tocara algo. Toqué y canté “Manos al aire” de Nelly Furtado.
-¿Qué también sabes español?- preguntó Louis.
-Y francés- dije cansada de que me interrogaran.
-Toda una Ladie- dijo Jane de broma.
-¿Ídolos?- preguntó Louis de repente ¿iba para mí?
-Beyoncé, Leona Lewis, Alicia Keys y Whitney Houston- le respondí.
-Entonces te gusta el Soul y lo cantas.
-Lou, yo no canto, así que no le des más vueltas al tema ¿Vale?- le sonreí y salí de la casa siguiendo a Alex.
                                                            -Narra Jane-
¡Diciembre! La actuación en los Teens Awaards moló un montón. Los chicos y  las chicas actuaron y Danielle y Liam se vieron. Pero nada de hablar. Ahora mismo estaba en el Aeropuerto JFK John Fotzgerald Kennedy ¿Os imagináis la ciudad?  ¡NEW YORK CITY! ¡Sí, esteba en New York!
-¿Cuántas veces ha venido a New York?- le pregunté a Beth que por lo visto se sabía el aeropuerto de memoria.
-Pues antes venía cada 6 meses, pero desde que mamá murió nada de nada- dijo mientras atravesábamos la puerta de la entrada. En Estados Unidos ella si podía conducir ¡Y sabía! Que morro.
-¿Sabes a donde vamos?- le pregunté preocupada- Se supone que si veníais cada 6 meses tenéis un piso.
-Una casa, para ser más claras- dijo mientras ayudaba a Danielle a meter las cosas en el maletero del choche.
Danielle ah venido para el concierto de los chicos porque es el más importante de la carrera de estos, y tenemos que apoyarlos. Es todo un detalle  por su parte.  Nos montamos en el coche y nos pusimos camino a la casa nueva, sería nuestra por una semana.
-Tengo que deciros algo- dijo Beth.
-¿Qué pasa?- preguntó Dani
-Pues… A ver- ¿Qué pasaba?- Es que me ha llamado Taylor- dijo pensativa.
-¿Y quién es Taylor?- le miré preocupada.
-Pues… Un amigo de aquí- suspiré- Es que me pidió un favor.
-Dilo de una vez mujer.
-Qué le hace falta que tenga a  su hermana en nuestra casa durante esta semana y ella se vendrá con nosotras a Londres- dije centrada en la carretera.
-Por mi bien- respondió Dani.
-Y por mi- le dije sin preocupación- Espero que no sea una súper pija.
-Se llama Lucía.
-Nombre de pija.
-Para- dijo Beth en un susurro.
Tardamos como una hora en llegar a la casa, porque hubo un accidente en el puente más famoso de New York. Y la verdad es que es una ciudad preciosa. No sé porque no eh venido antes. Ah, sí lo sé, no tenía dinero.
Llegamos a la casa, era inmensa. En la entrada el vestíbulo parecía un salón. La casa no estaba ni lejos ni cerca del centro. En el salón había un enorme piano de cola blanco con la siguiente frase en azul:
Rappelez-vous que ni les étoiles du ciel peut compter combien Je t'aime. Toujours en sécurité sous mon ciel.
Je t'aime.
La misma frase que había en el techo de mi habitación. Estoy comenzando a pensar que eso tiene algún significado.
Cada una se fue a su habitación. Perrie llegaba más tarde, no sabía si se iba a quedar con nosotras o no. Y Eleanor fue invitada, pero dijo que no. Y la verdad es que así es mejor. Espero que no cambie de parecer.
-¿Os apetece una visita guiada?- preguntó Beth mientras mirábamos la tele.
-No entiendo mucho de lo que hablan, esto es frustrante ¿Porqué hablan tan mal los americanos?- dije estresada.
-Ni que tú hablaras tan bien- Beth mi miró mal.
-Bien jugado McCadne- dije en bajo-Tengo sueño.
-Tendremos que aguantar hasta que los chicos lleguen, cenamos y a la cama ¿Vale? Tienes Jet Lag, eso es todo- dijo Danielle bajando las escaleras.
Eran las 6 de la tarde. Los chicos llegaban en dos horas. No estaba mal ¿Pero cuándo llegaría Lucía?
                                                                              -Narra Beth-
Lucía me llamó diciendo que llegaría en unos minutos. Estábamos todos en la mesa del gran comedor de la casa aquella. Me traía muchos recuerdos de mi infancia. Louis, Eleanor, Zayn, Perrie, Liam, Danielle, Harry, Jane, Niall y yo. Todos comiendo. Los chicos se quedaron impresionados con el piano de mi casa… Era normal. Tocaron al timbre.
-Sed amables- dije antes de levantarme. Fui y abrí. Una morena súper guapa y notablemente pija, aparecía ante mi… Con una blackberry en  las manos y mascando chicle.
-Hola- dije tímidamente.
-Hola ¿Tú eres Beth?- me preguntó sonriente, parecía maja. Asentí- Pues eres muy guapa- dijo animada, me sonrojé- No te pongas roja mujer. Es verdad.
-Pasa- le dije mientras abría más la puerta para que entrara. Detrás de ella había 5 maletas. Inmensas maletas.
-Chicos, esta es Lucía. Lucía estos son, Harry, Louis, Zayn, Niall, Liam, Danielle, Perrie, Jane y Eleanor. Unos amigos.
Ella no respondió. Cuando me giré estaba en el suelo tumbada con la cara pálida y los ojos cerrados. El efecto One Infection. 

viernes, 4 de enero de 2013

Capítulo 9 -Nada mejor que unas pelis-


                                                                 -Narra Niall-
Bien, estábamos en España, no vamos mañana a primera hora ¿Destino? ¡Italia! Me encanta Italia.  Las cosas no habían cambiado mucho desde hace una semana. Harry estaba enfadado, aunque la gente de nuestro alrededor no dijera lo mismo.
-Me voy a la cama- dijo Liam, estaba cansado y lleno de purpurina y colorante para la comida. Ya se había duchado, pero costaba quitarlo.
-Hasta mañana- respondí- Yo también me voy a la cama. Tengo ganas de llegar a Londres ya.
-Tenemos que arreglar esto- dijo Louis- No podemos seguir así- susurró.
-Eso tenías que habérselo dicho a “tu chica favorita”- le contestó Harry- Arréglalo Louis. Cuando llegue a Londres quiero que todo siga igual- se le notaba enfadado.
                                                                         -Narra Beth-
Una semana. Bien. Dentro de dos días y medio llegaban los chicos. No sé si Massiel y Jane estaban preparadas para verlos. Y tampoco sé si yo estaba preparada para verlos.
-¡Beeeeth!- gritó Jane cuando me vio- Ha sido un día muy largo sin ti- dijo mientras me estrechaba entre sus brazos.
-Que exagerada eres por dios, si solo son las 2:30 de la tarde- dije tirándome en el sofá, hoy había hecho 4 horas de danza. Nada de música.
-Pero pensé que no llegarías a tiempo- le miré estresada- ¡Me prometiste que irías conmigo!- sí, estoy completamente estresada.
-Pero dame un tiempo ¿No?- es irritante-Por lo menos 5 minutos mujer- hice pucheros.
-Esa las 3 y casi es la hora… Nos llevará  tu chófer, que el de tu padre está ocupado, además tengo tu comida en esta bolsa- me enseñó la bolsa de papel- Es carne roja- se que lo hiso para tentarme- Te dejaré que comas en el coche si nos vamos ahora.
-Dios, mira que eres pesada. Vale, iré, pero tienes que hacer algo por mi- me miró, sabía lo que le iba a pedir. Llevo una semana dándole la lata con lo mismo.
-Vale- abrí los ojos como nunca en mi vida- ¿Qué te extraña? Eres muy pesada.
-Oh… Gracias por el elogio señorita Green. No sabía que me quería tanto- dije en un tono sarcástico- ¿Danielle va?- le miré sonriente mientras nos montábamos en el coche.
-Sí, me dijo que no le vendría mal un poco de dinero. No trabaja desde hace dos semanas, aunque le pagaron muy bien
-Pero mira que eres cotilla- me miró con su típica mirada asesina- A lo mejor se quiere comprar unos zapatos nuevos súper mega caros- sonreí. El coche se puso en marcha.
-No, no quiere zapatos- miraba por la ventanilla- Quiere unas zapatillas de ballet que cuestan 1200 libras. No sé cómo se las pagará. Tiene muchos gastos y yo lo veo un capricho.
-Pues me alegro de que tenga uno- dije decidida, ella me miró contrariada- Si, claro que sí. Ella trabaja duro, y se sacrifica  por todo lo que hace. Par cumplir sus sueños. Además las zapatillas no son muy caras.
-Oh, habló la niña de mamá y papá- dijo Jane. La odiaba a veces, y esta era una de ellas.
-De papá- la corregí.
-Lo siento- se dio cuenta- ¿Qué tal con Alex?- cambio repentino de conversación. Típico en Jane.
-Pues… como siempre- sonreí.
-¿Perfecto, entonces?- me miró sorprendida.
-Exacto- sonreí. Abrí la bolsa de papel, tenía mucha hambre. Pero mis expectativas no se cumplieron. Había una hamburguesa ¡Una hamburguesa! ¿Sabéis que es que os den una triste hamburguesa después de un duro día de trabajo?- ¡Te voy a matar Green!- Y salté encima de ella para pegarle. Ahora sí que el protocolo se iba a ir a la mierda.
                                                                              -Narra Danielle-
Las chicas llegaban tarde. Estaba en la puerta del estudio, solo nos daban 10 minutos para prepararnos y nos quedaban 6. Dios ¿Porqué no pueden ser puntuales?
-Hola- sentí la tímida voz de Beth detrás de mí. Llevaba una súper bolsa e iba vestida de baile.
-Hola, venga vamos que no hay tiempo- tiré de ella y de Jane.
Después de hacer que Jane se cambiara a toda prisa, nos fuimos al escenario. Estábamos adicionando para bailarinas de todas las actuaciones en los Teens Awards. Beth estaban sentada mirándonos entretenida. Y yo estaba mirándome las zapatillas, hoy me molestaban más de lo normal.
-Bien chicas. Mirad, tenéis 10 minutos para aprenderos la coreografía de “wings “  de las “Little Mix”  Esa será la más difícil que haremos. Las que mejor lo hagan estarán dentro. Y las demás. A la calle- dijo un hombre muy guapo. Pero a millas se notaba que era gay.
  -O sea, que tenemos el trabajo asegurado- le dije a Jane que estaba a mi lado mordiéndose las uñas.
-Pues si…Mira, para algo nos ha servido ayudar a Perrie para que se aprenda la coreo.
-Horas de ensayo- dije en un tono cansino- ¿Y si le decimos a Beth que se apunte con nosotras?- sonreí mirando a Beth que estaba impresionada por como bailaban las chicas.
-No creo que quiera, es muy tímida.
-Es bailarina, venga, con probar no se pierde nada.
Bajamos del escenario. Y después de convencerla le enseñamos la coreo, fueron 5 minutos, no más. Pero creo que se la aprendió.
A Jane y a mí nos eligieron. Y la verdad es que si no lo hacían dejaría el baile porque tengo horas de ensayo con la misma canción. Ahora mismo Beth está haciendo la prueba. No creo que lo haga por dinero. Más bien por diversión.
-¿Qué crees?- le pregunté en un susurro a Jane.
-Es buena- estaba concentrada, como yo, no perdíamos detalle- Debería dedicarse a esto, se lo ha aprendido en 5 minutos. Y lo está haciendo mejor que todas las que están ahí- dijo boquiabierta.
-Las está aplastando- dije sonriendo- A lo mejor a nosotras también nos aplasta- dije en broma.
-No lo dudes. Por lo menos a mi si- respondió Jane- Tú has hecho ballet, por lo menos te podrás defender- dijo sonriendo- Mi hermanastra es la ama. Y parece un angelito- su sonrisa no podía ser mayor.
                                                              -Narra Beth-
 Hoy era el día. Ayer Eleanor vino a casa porque la invité. Sí, me costó mucho. El trato de Jane y mío fue claro. Yo voy contigo a las audiciones si tú perdonas a Eleanor. Es verdad que la chica que tuvo que arrastrar mucho, con no decir que demasiado. Pero Jane la perdonó.
Ahora estamos en el aeropuerto. Perrie, Jane, Eleanor y yo. Esperamos por los chicos. Massiel sigue enfadada, y Dani no pinta nada aquí. Eso es lo que menos me gusta.
La tensión es demasiada. Porque aunque Eleanor haya sido perdonada, Jane le quiere pegar. Pero nada mejor que el soborno. Le eh prometido un móvil nuevo. Que me costará 800 pavos. No sabía que tener amigos me iba a salir tan caro.
Los chicos salieron de la puerta de embarque. Con gafas. Las fans. Entonces Jane y yo nos escondimos. Perrie y Eleanor fueron a abrazar a sus respectivos novios y uno de ellos estaba muy arisco. Ya sabéis quien.
-¡Pero mira!- dije haciéndome la asombrada- ¡Si son los chicos de One Direction!- sonreí.
-¿Quiénes son esos?- preguntó Jane mientras bajaba las gafas de sol con la mano en plan sexi. Y lo consiguió. Parecer sexi, digo.
¿Cómo lo hacía? Yo también quiero ser sexi. Porque según Jane soy una sosa de mucho cuidado que guarde muchos haces debajo de la manda. No, no me preguntéis. Esa es su teoría.
-Entonces… ¿No os alegráis de que hayamos decidido venir a recibiros?- dije haciendo pucheros- Ya os vale, me eh tenido que levantar temprano  en mi único día de descanso- sonrieron. Y no sé si fue imaginación mía o algo así, porque nos aplastaron a los 5 segundos. Estos chicos tienen un problema muy serio con las reacciones.
-Bien, cada uno busca un peli, su favorita. Este regreso se merece una celebración en alto. Nadie le puede enseñar la peli a la otra persona. Cada cual pagará y después a casa a verlas todas- dijo Liam terminando de dar las instrucciones en el videoclub.
-¿Las podemos comprar?- pregunté como una niña pequeña. Todos me miraron y me puse roja como un tomate.
-Si tú quieres, no tienes que preguntarme Beth- dijo Liam mientras se reía.
-Muy gracioso Payne. Es que todos te prestaban atención en plan “este es nuestro padre y si no le hacemos caso nos castigará sin tele y videoconsola”- dije imitando la voz de un niño pequeño.
-Muy graciosa tú- dijo Liam mientras nos empujaba para que empezáramos.
Después de media hora de correr por el video club y esconder mi peli para que los chicos no la vieran, pagué y salí. Bien… A lo mejor no les gustaba mi peli, pero entre mis dos favoritas tenía que escoger una.
                                                                    -Narra Jane-
Entramos a casa de los chicos y me tiré en el sofá. Vi que Liam escondía su peli y reí. Dios que niño más inocente.
-Liam- le llamé, todos miraron, que cotillas-¿Porqué escondes tu peli?- se sonrojó- ¡Si ya todos sabemos que es Toy Story- los demás rieron a carcajadas… El simplemente sonrió.
-Hala- dijo Beth mosqueada- Yo no sé cuáles son sus pelis favoritas… Así que no me arruinéis la fiesta.
Hicimos un sorteo, la primera fue Perrie. Que encantada nos puso una peli-musical. Como no. Greace. Seguida de Liam y su Toy Story 3. Harry y Love Actually. Zayn y Greace.
-No pienso ver Greace otra vez- me negué.
-¿Porqué?- Zayn me miró poniendo ojitos- Es que me gusta mucho- dijo en tono burlón.
-No, en serio, ya no aguanto más canciones.
Al final me obligaron a verla otra vez. Pero me quedé dormida. Bien, mi turno. Mi peli es un clásico.
-¿Preparados?- sonreí ilusionada. Todo asintieron pero Harry siempre me corta el rollo.
-Seguro que es “Pretty Woman”- mi sonrisa se fue.
-Rompe momentos mágicos- Beth le pegó una hostia- A callar. Si todos sabemos cuál es, además, esa peli es muy bonita. Os describe- me guiñó un  ojos.
-Oh no- dijo Niall mientras le saltaba encima a Harry ya Beth para pegarles. Dios ¡Me han llamado puta!
Una vez calmados, vimos la peli… Harry no paraba de soltar indirectas y yo no paraba de pegarle hostias. Beth lloró y Louis la abrazó.
-Tiene novio- le dije a Eleanor en un susurro mientras le guiñaba el ojo. Ella me miró asustada y Liam me pegó- Au- me quejé.
-Para de chinchar- me dijo Liam mientras me acariciaba el pelo.
Turno de Eleanor, nada mejor que Titanic ¿Verdad? Después Niall, que no dudó en poner  “Lluvia de albóndigas” Y  por último Beth y Louis. No sabíamos que peli poner primero, así que  decidimos que enseñaran sus pelis a la vez para decidir nosotros.
-Venga, uno, dos  y tres- dijo Perrie mientras ellos nos enseñaban las pelis con los ojos cerrados. Empezamos a reírnos.
-¿De qué os reís?- preguntó Beth aún con los ojos cerrados.

martes, 1 de enero de 2013

Capítulo 8- Ella va a ir a por tí-


Me quedé helada. ¿Cómo era posible que pasara esto? Miré a Eleanor, tenía una sonrisa burlona en la cara, y Jane tenía la palma de su mano acariciando la mejilla que Eleanor acababa de abofetear.
-¿Qué has hecho?!- le grité a Eleanor alterada-¡Eres una hija de puta!- dije mientras cogía las cosas del sofá. Estaba enfadada, nadie decía nada. ¿Sólo yo? Esto es frustrante- Vámonos- dije mientras empujaba a Jane- Ya os vale a todos, sabíais que ella no le iba a pegar a Eleanor, estoy segura que os enfadaríais si lo hubiera hecho. Pero si Eleanor le pega no pasa nada ¿No?
-Tienes razón- soltó Massiel ¡Sorpresa!- Te has pasado El, tú la insultaste y a nosotras, ¿Y después le pegas?  Has caído bajo esta vez. Me voy con vosotras.
Me sorprendió, nadie se movía, ni Ed ¡Mi Ed! Dios, ¿Porqué? De Lou lo entiendo, es su novia, pero… ¿Y Liam? ¿Zayn, Niall, Harry, Jade, Jessi, Leihg-Ane y Perrie? ¿Dónde están nuestros amigos?
Salimos caminando de aquel barrio pijo. Jane seguía sin decir nada. Y Massiel, no es que estuviera arrepentida de irse con nosotras, si no que estaba incómoda. Claro, Harry, Jane, ella… Esto no mola mucho.
-¿Por qué has venido con nosotras?- espetó de una vez Jane. Al fin regresaba la Jane insoportable.
-Pues…- Massiel buscó las palabras adecuadas-Porqué nos defendiste, me defendiste. Sé que me odias, y no digas que no. Por eso estoy aquí.
-No, no te odio- dijo Jane, todo lo contrario a lo que le mandó a hacer la chica morena controladora- Sólo no me caes bien, pero el odio es un sentimiento demasiado fuerte, eso me lo guardo para Harry- seguíamos caminando saliendo del barrio pijo y  adentrándonos en uno de los más chungos de Londres, Jane nos decía por dónde ir.
-Interesante observación- dijo Massiel- ¿A dónde vamos?- nos miró confundida, primera vez que veía una expresión así en su cara.
-Ni idea- respondí- Pensé que iríamos a casa, pero parece que Jane tiene otros planes
-Nos vamos a emborrachar- dijo Jane- Con mis amigos chugos- nos guiñó un ojo y le seguimos. La noche lo merecía.
                                                                      -Narra Louis-
-¡¿Qué has hecho?!- le grité a Eleanor.
-Pues pegarle, ¿No has visto como me miraba? Resultaba acojonante- me respondió alterada.
-¡Le has llamado guarras! ¡A todas!- le grité, los chicos nos miraban.
-Nosotras nos vamos- soltó Jade, y se fueron todas menos Perrie.
-Lou, no te pases- dijo Perrie en baja voz, pero yo estaba enfadado- Se ha equivocado, ya está- esta sonrió.
-No Perrie, tú sabes que no, os ha llamado guarras  y no es solo esto, también le ha pegado a Jane. ¿Qué pasaría si Jane le hubiera devuelto la hostia?- estaba asustado, eso era lo que más me preocupaba, que Jane hubiera reaccionado de otra forma.
-¿No has visto como ha reaccionado?- espetó El- No ha hecho nada, esa no tiene cojones de pegarme- rió ¿Porqué vacilaba en un momento así?
-Para tú información- interrumpió Harry- Ella se ha criado en uno de los barrio más chungos de Londres ¿Sabes tú lo que es la supervivencia? No. ¿Verdad? Pues eso, que si ella no se hubiera controlado, ahora tendrías un moratón en la cara, de la hostia que te habría dado. Esto no quedará así Eleanor, va a ir a por ti, y no quedarás bien parada.
Harry salió de la estancia, si, todos sabíamos que únicamente que Dani la detuviera, Jane iría a por Eleanor. Y ella no sabía en el lío que se acababa de meter.
Liam estaba aún sorprendido  y Ed sacó el móvil. ¿Qué hacía?
-Llamo a Beth- respondió a la pregunta que no formulé- Nada, no responde, me ha colgado- dijo con un tono de decepción.
-Llama a Massiel- le dije a Niall, el me hiso caso… sacó el móvil y comenzó a marcar.
-¿Massiel?- preguntó Niall asustado- Si, están preocupados….Si, han reaccionado como 10 minutos después, imagínate, 10 minutos de silencio. Dios era insoportable… Vale, ¿Cómo está? Perfecto, si, terminal 3 a las 6 am. Sí, nos vamos a Francia, después 5 países más y regresamos- Niall nos miró- No, no diré nada, será cosa nuestra. Te quiero pequeña.
-¿Qué dijo?- le preguntó Zayn.
-¿No habéis escuchado? No diré nada- Niall se notaba enfadado. Lo entendía.
-Niall- dijo Liam como presionándolo- Por favor.
-No diré nada. Louis, tú, deberías controlar a tu novia, ella no tienen la culpa de que Eleanor sea un chicle y valla pensando mal de las demás. Os habéis salvado de que Jane se quedó en blanco porque no se lo creía, y que Massiel es amiga de El. Porqué cualquiera de las dos tiene la fuerza y la técnica suficiente para deshacerse de cada uno de nosotros y reventarle la cabeza a Eleanor. Gracias por reaccionar 10 minutos después.
Perfecto, ahora Niall también se enfada ¿Qué pasa? Yo también me quedé como Jane, incrédulo a lo que Eleanor había hecho. Dios ¿Qué hago?
-Me voy a la cama- dijo Liam. Zayn y Perrie seguían ahí, esperando a que los echara, porque me conocen. A lo mejor los quería aquí. Pero no sé.
-Yo también me voy a la cama- dijo Eleanor, pero me puse delante. Si, iba a arder Troya.
-Es mejor que te vayas a casa de tu madre hoy- dije enfadado.
-¿Qué?- me miró incrédula. “Si Eleanor, que te vayas a casa”  dije en mi fuero interno.
-Que te llevaré a casa- dijo Zayn, lo quiero ahora mismo- Si no te importa- se sonrojó, Eleanor asintió, cogió su bolso y su abrigo y después intentó besarme. La aparté. Si estoy muy enfadado.
-¿En serio Louis?- gritó- Te vas mañana, no me puedes hacer esto- dijo dolida.
-Solo será una semana, en la que quiero pensar si esto funcionará y si debo creer todo lo que ha dicho Jane.
-Me deberías creer a mi- dijo enfadada.
-Lo mismo digo- y subí las escaleras hasta mi habitación. Zayn seguramente la llevaría, no quiero saber nada de lo que está pasando abajo. Estoy enfadado y enamorado ¿Cómo se afronta eso?
                                                        -Narra Beth-
Eran las 4 y media y estábamos camino al aeropuerto de Heathrow.  No nos faltaba mucho. Pero bueno, teníamos que ir a despedirnos de Zayn, de Niall y de Liam, ellos no tenían culpa de nada ¿O sí? No lo sé.
A Massiel no le costó mucho convencerme, pero convencer a Jane le costó demasiado, tanto que la emborrachamos para que aceptara ir.  Ya sabemos que está mal, pero bueno, cometemos errores ¿No?
Entramos en el aeropuerto y miramos a todas partes.
-Buscad un tumulto, si no hay entonces buscad a chicos disfrazados de detectives, pero como el horno no está para galletitas, entonces buscad a 5 tíos en pijama. El de Niall de tréboles, empezar por ahí- dijo Massiel.
-El de Louis de zanahorias, Zayn con pantalones grises, Harry de cualquier color, no tiene pijama, Liam con uno que lleva cucharas. No sé donde lo compró y Paul con gafas de aviador. Vigilándolos- dijo Jane. Se conocen muy bien por lo que veo.
No fue tan difícil, vimos a una chica rubia en pijama, esa sin duda era Perrie, después a su lado vimos a Zayn y a los chicos… pero Lou estaba apartado de todos… Hablando con alguien, parecía una modelo, era muy guapa. Como no, se llama Eleanor Calder. No está discutiendo, pero el ambiente no es relajado. Caminamos hacia ellos. Jane va detrás de mi junto con Massiel que le está diciendo que se calme. Se encendió como un mechero cuando vio a Eleanor.
-Hola- dije tímidamente, el primero en girarse fue Harry que  vino y me abrazó.
-Hola niña pija- el tan gracioso como siempre.
-Hola niño creído con rulos y sonrisa perfecta- le respondí.
-¿Qué haces aquí? Hueles a alcohol ¿Has bebido? Dios ¡Tú no puedes beber!- los chicos lo miraban sonriendo.
-Eh… ¿Para el carro Styles, para colmo que vengo a despedirme te pones así? Era mejor quedarme en la discoteca, hombre.
-Ah… ¿Qué no te has ido a casa?- preguntó Liam.
-No, no se han ido- dijo Niall.
-¿Cómo que no se han ido?- preguntó Harry, di un paso al lado… Y miraron a Jane, iba borracha, apoyada en Massiel que tenía la mirada rabiosa….
-Hola- dijeron todos prácticamente a la vez, Louis se acercó seguido de Eleanor.
-A ti te quería ver puta de mierda- abrí los ojos como platos. Oh no. Claro que era Jane.
-Jane, lo siento- dijo Eleanor ¿Tanto miedo había que tenerle?
-Si lo sintieras de verdad te perdonaría, pero como sé que Louis el hijo de puta de tu novio- se está pasando.
-¿Crees que Louis me puede obligar a hacer esto?- preguntó Eleanor.
-No, no puede, pero tienes tanto miedo a perderlo que haces lo que él cuando él lo dice. Sin darte cuenta de que está estúpidamente enamorado de ti, y que haría cualquier cosa por defenderte. Cómo por ejemplo, perder tres amigas de sopetón por defenderte, no de la manera esperada pero te ha defendido. Aunque después te diga lo que te diga. A nuestros ojos. Ha dado la cara por ti- dije enfadada- Os deseo un buen viaje chicos…. Y Eleanor, acuérdate que hasta el mejor chicle, un día determinado pierde su ansiado sabor- Y sentí como jane reía- Hasta la próxima.
                                                               -Narra Harry-
¿Le ha dicho a Eleanor Jane Calder que va a perder el sabor? ¡Dios! Esta chica es la ama.
-¿Qué le estabas diciendo tú a Jane?- le pregunté e Massiel con rabia.
-Pues mira… Va a ser que no me gusta cómo me acabas de hablar, pero aún así te responderé. Ahora somos amigas, porque eres un cabrón de mierda que te tiras todo lo que se mueve. Le acabo de decir que si tiene ganas de partirle la cara a Eleanor, que yo os aguantaré para que no la detengáis. Porque teníais que dar la cara por ella. Porque todos sabéis que todo lo que dijo era verdad, y  no ser tan capullos todos. Incluido tú Niall. Yo os aprecio, pero habéis perdido 4 amigas de una. Si, Danielle también entra en el juego- y salieron de allí. ¿Por qué estaba llorando? Claro, porque las chicas que me gustan son amigas y ahora mismo me odian más que a nada en el mundo.
-Louis- dije agonizando- O la controlas, o yo mismo me encargaré de que está mierda se acabe para siempre.
Sí. Me refería a One Direction ¿Porqué continuar con esto, si todos habíamos tomado direcciones diferentes? Dios, esto es agotador.